Tarta Kinder, {mi tartaza cumpleañera :D}
¡¡Holis!! ¿¿Qué tal todo? Hay que ver que estamos casi a mediados de mayo y yo sin estrenarlo como se merece, jeje. Y es que, aunque ya acabaron los días de trabajo, me han venido unas semanas, (y aún ando con ello en realidad, ejej) con entregas de trabajos varios para la facultad. Hecho que se sumó a la celebración de mi cumple, jejeje que me tuvo rodeada de harinas, bizcochos, chocolates y frostings varios, jijij. Estaréis al tanto de eso si seguís mi Instagram y si no, os invito a visitarla, y así veis la mesa taan ideal que quedó ;)
Total, que entre unas cosas y otras no había podido sentarme a escribir y hoy, en un huequito, mientras veo Masterchef, empiezo a escribir la entrada para enseñaros la tartaza que presidía mi merendola cumpleañera que organicé el pasado finde, jeje, (aunque he podido acabarla hoy domingo :O)
Tachán tachán, con todos vosotros, mi deliciosa Tarta Kinder =D.
La elección de la tarta tuvo su proceso, ya que, como tengo tantas ideas, libros, recetas..., cuando llega un evento así, entro en la duda sobre cuál elegir jiji.
En esta ocasión, el decantarme por ésta fue básicamente a raíz del Instagram de Praliné Bakery, donde se pueden ver las genialidades de dulces que hace. Pues bien, una de estas tartas, es la Tarta Kinder, pero de la que no hay receta, por lo que me puse en proceso de búsqueda a través de blogs y libros varios para lograr tener una similar =D
El resultado me encantó..., no sé cuánto se parecerá a la original, pero mi versión me encantó..., con ese bizcochito de chocolate, cubierto por esa crema de avellanas deliciosa y todo culminado con una ganache de chocolate =D ¡¡uhmmm!! =D
La receta del bizcocho así como la de la crema de avellana, proviene del blog The Sweetest Taste, y luego la ganache, está inspirada en la receta del fantástico libro de Sandra Mangas, "Chocolate". Con todas estas partes, obtuve la tartaza que podéis ver en las fotos, hiperpreciosa y superbuena ;)
He de confesar que el proceso no estuvo exento de complicaciones: cuando ya estaban los bizcochos metidos en su horno y yo me disponía a recoger y dar por finalizada la sesión reposteril de ese día, me veo al lado del peso, mi recipiente con el azúcar, mirándome y riéndose de mi..., ¡NOOOOO!!! De verdad que no me lo podía creer. Así que nada, a sacar los bizcochos y a empezar de 0, a repetir enterito el proceso de los bizcochos.
Aparte de eso, fue todo bien, jeje La receta, como suele pasar con los layer cakes, es algo laboriosa porque tiene varias partes, pero nada que una mínima organización no pueda resolver, jijij ;)
Total, ¿comenzamos ya con la preparación? Pues nada, todos manos a la masa y a probar este deliciosa tarta:
- 1 cucharadita de bicarbonato.
- 1 cucharadita de levadura en polvo.
- Una pizca de sal.
- 60g de chocolate tipo postres.
- 2 huevos.
- 120ml de aceite.
- 240ml de buttermilk, (230ml de leche + 1 cucharada de vinagre).
- 240ml de agua hirviendo.
- 300g de azúcar, (que no se os olvide, jeje)
- 225g de harina.
Para la crema de avellana, (relleno y exterior):
- 3 claras de huevo.
- 200g de azúcar normal.
- 200g de mantequilla blandita,a temperatura ambiente.
- 1 cucharadita de avellana en pasta, (si no la tuvierais, basta con moler con la picadora un puñado de avellanas, hasta que se hagan una pasta ;D).
Para la ganache:
- 200ml de nata para montar.
- 200g de chocolate tipo postres.
- 50g de mantequilla.
Para decorar: trocitos de Kinder Bueno.
1. Comenzamos con los bizcochos: lo primero será precalentar el horno a 180ºC y preparar los moldes, (en este caso 3 moldes desechables de 20cm), engrasando con mantequilla y luego pasando harina por encima. Reservamos.
2. Colocamos en un bol el chocolate troceado y le añadimos el agua hirviendo. Removemos hasta que el chocolate esté completamente derretido e integrado y dejamos reposar unos 15 minutos, pata que pierda un poco de calor.
al mismo tiempo, ponemos la leche en otro recipiente y le añadimos la cucharada de vinagre e igualmente, dejamos reposar unos 10 minutos, hasta que adquiera un aspecto de leche cortada.
3. En otro recipiente aparte, mezclamos la harina junto con la levadura, el bicarbonato, la sal y el cacao en polvo. Tamizamos el conjunto y reservamos.
4. Ahora, batimos los huevos junto con el azúcar con varillas eléctricas, hasta que aumenten de volumen y espumen. A continuación, iremos añadiendo poco a poco el aceite, mientras continuamos batiendo.
5. Una vez mezclado, añadimos ahora la mezcla de chocolate y agua, (que ya debe haberse enfriado) e integramos con el conjunto, (yo aquí ya de forma manual ;D), y posteriormente, incorporaremos la buttermilk y volvemos a mezclar hasta que todo esté homogéneo.
6. A continuación, iremos añadiendo poco a poco la mezcla de harina e integrando, con cuidado de no sobrebatir la mezcla.
7. Una vez que todo esté bien incorporado, repartiremos la mezcla entre los 3 moldes, de forma que queden distribuida de forma equitativa y llevamos al horno unos 20 minutos, o hasta que pinchemos con un palito y éste salga limpio.
8. Una vez listo, sacaremos del horno y dejaremos enfriar sobre una rejilla unos 20 minutos. Luego, desmoldaremos y dejaremos enfriar por completo nuevamente sobre la rejilla. Cuando estén completamente fríos, envolveremos en papel film y llevaremos al frigo donde dejaremos toda la noche.
Vamos, que no decaiga la cosa, que ya está hecha la peor parte, jijiji ;)
Ahora preparamos la crema de avellana:
1. En un recipiente al baño maría, colocaremos las claras junto con el azúcar e iremos removiendo hasta que el azúcar esté completamente disuelto.
2. Una vez listo, verteremos en un bol y montaremos con varillas eléctricas hasta obtener un merengue firme y brillante, (absolutamente precioso, jijij). Seguidamente, le iremos incorporando la mantequilla, (que debe estar blandita), y continuaremos batiendo hasta obtener una mezcla sedosa, (unos 10 minutos más o menos). A mitad del proceso, adquiere textura como cortada, pero don´t worry, es así, sólo hay que continuar batiendo ;D.
Pasados casi los 10 minutos, añadir la cucharadita de pasta de avellana y batir un poco más, hasta que se distribuya bien la avellana.
Y lista, ya tendréis la crema lista para su uso.
Y finalmente, realizaremos la ganache de chocolate: calentaremos la nata en un cazo al fuego hasta llevar a ebullición. Una vez que rompa a hervir, le incorporamos el chocolate troceado y vamos removiendo hasta que la mezcla esté homogénea y todo bien integrado.
2. Finalizamos añadiéndole la mantequilla y nuevamente, vamos mezclando hasta que todo se integre. Dejaremos reposar para que pierda calor y la textura se solidifique un poco.
¡¡Vamos, el último tirón, que sólo queda el montaje de la tarta!!
1. Lo primero será desenvolver los bizcochos del papel film, jeje. Disponemos sobre la base elegida el primero de los bizcochos y sobre éste, colocamos unas cucharadas de la crema de avellana. Distribuimos bien con la ayuda de nuestra paleta y colocamos encima el siguiente de los bizcochos.
2. Repetimos el proceso hasta finalizar con el último de los bizcochos. Cubriremos la superficie y los laterales con la crema de avellana y alisaremos con la espátula, hasta que nos quede un aspecto bonito y todo bien cubierto. Enfriaremos ligeramente y terminaremos añadiéndole la ganache de chocolate por encima, con cuidado.
3. Finalizaremos decorando con unos trocitos de Kinder Bueno, que colocaremos sobre unos montoncitos de crema de avellana ;)
Y listísima, ya tendréis vuestra tartaza lista para ser disfrutada.
Valeee, que sí que es una tarta laboriosa, pero éstas son las que se guardan para ocasiones espaciales y así sorprender a todo el personal, jeje ;D
¡¡Mirad el interior!! No me digáis que no tiene una pintaza máxima!! =D
Como véis, las fotos del corte las tuve que hacer en otro día y en otro momento, jeje, porque no era plan de montar el chiringuito de la foto en medio del cumple, jijij =D
Pues nada, con esta foto, me despido ya por fin, jeje, (es que a complicación no sólo ha residido en su elaboración: el escribir la entrada me ha llevado casi más que en la elaboración...puf de verdad qué desesperación!).
Bueno, pues espero que pase a vuestra lista de tartas de celebración porque de verdad que está brutal ;D
Lo mejor para la semana que comienza y a endulzarla se ha dicho!! =D
....hasta la próxima recetichi!! =D =D
Total, que entre unas cosas y otras no había podido sentarme a escribir y hoy, en un huequito, mientras veo Masterchef, empiezo a escribir la entrada para enseñaros la tartaza que presidía mi merendola cumpleañera que organicé el pasado finde, jeje, (aunque he podido acabarla hoy domingo :O)
Tachán tachán, con todos vosotros, mi deliciosa Tarta Kinder =D.
La elección de la tarta tuvo su proceso, ya que, como tengo tantas ideas, libros, recetas..., cuando llega un evento así, entro en la duda sobre cuál elegir jiji.
En esta ocasión, el decantarme por ésta fue básicamente a raíz del Instagram de Praliné Bakery, donde se pueden ver las genialidades de dulces que hace. Pues bien, una de estas tartas, es la Tarta Kinder, pero de la que no hay receta, por lo que me puse en proceso de búsqueda a través de blogs y libros varios para lograr tener una similar =D
El resultado me encantó..., no sé cuánto se parecerá a la original, pero mi versión me encantó..., con ese bizcochito de chocolate, cubierto por esa crema de avellanas deliciosa y todo culminado con una ganache de chocolate =D ¡¡uhmmm!! =D
La receta del bizcocho así como la de la crema de avellana, proviene del blog The Sweetest Taste, y luego la ganache, está inspirada en la receta del fantástico libro de Sandra Mangas, "Chocolate". Con todas estas partes, obtuve la tartaza que podéis ver en las fotos, hiperpreciosa y superbuena ;)
He de confesar que el proceso no estuvo exento de complicaciones: cuando ya estaban los bizcochos metidos en su horno y yo me disponía a recoger y dar por finalizada la sesión reposteril de ese día, me veo al lado del peso, mi recipiente con el azúcar, mirándome y riéndose de mi..., ¡NOOOOO!!! De verdad que no me lo podía creer. Así que nada, a sacar los bizcochos y a empezar de 0, a repetir enterito el proceso de los bizcochos.
Aparte de eso, fue todo bien, jeje La receta, como suele pasar con los layer cakes, es algo laboriosa porque tiene varias partes, pero nada que una mínima organización no pueda resolver, jijij ;)
Total, ¿comenzamos ya con la preparación? Pues nada, todos manos a la masa y a probar este deliciosa tarta:
Para el bizcocho:
- 130g de cacao en polvo sin azúcar tipo Valor.- 1 cucharadita de bicarbonato.
- 1 cucharadita de levadura en polvo.
- Una pizca de sal.
- 60g de chocolate tipo postres.
- 2 huevos.
- 120ml de aceite.
- 240ml de buttermilk, (230ml de leche + 1 cucharada de vinagre).
- 240ml de agua hirviendo.
- 300g de azúcar, (que no se os olvide, jeje)
- 225g de harina.
Para la crema de avellana, (relleno y exterior):
- 3 claras de huevo.
- 200g de azúcar normal.
- 200g de mantequilla blandita,a temperatura ambiente.
- 1 cucharadita de avellana en pasta, (si no la tuvierais, basta con moler con la picadora un puñado de avellanas, hasta que se hagan una pasta ;D).
Para la ganache:
- 200ml de nata para montar.
- 200g de chocolate tipo postres.
- 50g de mantequilla.
Para decorar: trocitos de Kinder Bueno.
2. Colocamos en un bol el chocolate troceado y le añadimos el agua hirviendo. Removemos hasta que el chocolate esté completamente derretido e integrado y dejamos reposar unos 15 minutos, pata que pierda un poco de calor.
al mismo tiempo, ponemos la leche en otro recipiente y le añadimos la cucharada de vinagre e igualmente, dejamos reposar unos 10 minutos, hasta que adquiera un aspecto de leche cortada.
3. En otro recipiente aparte, mezclamos la harina junto con la levadura, el bicarbonato, la sal y el cacao en polvo. Tamizamos el conjunto y reservamos.
4. Ahora, batimos los huevos junto con el azúcar con varillas eléctricas, hasta que aumenten de volumen y espumen. A continuación, iremos añadiendo poco a poco el aceite, mientras continuamos batiendo.
5. Una vez mezclado, añadimos ahora la mezcla de chocolate y agua, (que ya debe haberse enfriado) e integramos con el conjunto, (yo aquí ya de forma manual ;D), y posteriormente, incorporaremos la buttermilk y volvemos a mezclar hasta que todo esté homogéneo.
6. A continuación, iremos añadiendo poco a poco la mezcla de harina e integrando, con cuidado de no sobrebatir la mezcla.
7. Una vez que todo esté bien incorporado, repartiremos la mezcla entre los 3 moldes, de forma que queden distribuida de forma equitativa y llevamos al horno unos 20 minutos, o hasta que pinchemos con un palito y éste salga limpio.
8. Una vez listo, sacaremos del horno y dejaremos enfriar sobre una rejilla unos 20 minutos. Luego, desmoldaremos y dejaremos enfriar por completo nuevamente sobre la rejilla. Cuando estén completamente fríos, envolveremos en papel film y llevaremos al frigo donde dejaremos toda la noche.
Vamos, que no decaiga la cosa, que ya está hecha la peor parte, jijiji ;)
Ahora preparamos la crema de avellana:
1. En un recipiente al baño maría, colocaremos las claras junto con el azúcar e iremos removiendo hasta que el azúcar esté completamente disuelto.
2. Una vez listo, verteremos en un bol y montaremos con varillas eléctricas hasta obtener un merengue firme y brillante, (absolutamente precioso, jijij). Seguidamente, le iremos incorporando la mantequilla, (que debe estar blandita), y continuaremos batiendo hasta obtener una mezcla sedosa, (unos 10 minutos más o menos). A mitad del proceso, adquiere textura como cortada, pero don´t worry, es así, sólo hay que continuar batiendo ;D.
Pasados casi los 10 minutos, añadir la cucharadita de pasta de avellana y batir un poco más, hasta que se distribuya bien la avellana.
Y lista, ya tendréis la crema lista para su uso.
Y finalmente, realizaremos la ganache de chocolate: calentaremos la nata en un cazo al fuego hasta llevar a ebullición. Una vez que rompa a hervir, le incorporamos el chocolate troceado y vamos removiendo hasta que la mezcla esté homogénea y todo bien integrado.
2. Finalizamos añadiéndole la mantequilla y nuevamente, vamos mezclando hasta que todo se integre. Dejaremos reposar para que pierda calor y la textura se solidifique un poco.
¡¡Vamos, el último tirón, que sólo queda el montaje de la tarta!!
1. Lo primero será desenvolver los bizcochos del papel film, jeje. Disponemos sobre la base elegida el primero de los bizcochos y sobre éste, colocamos unas cucharadas de la crema de avellana. Distribuimos bien con la ayuda de nuestra paleta y colocamos encima el siguiente de los bizcochos.
2. Repetimos el proceso hasta finalizar con el último de los bizcochos. Cubriremos la superficie y los laterales con la crema de avellana y alisaremos con la espátula, hasta que nos quede un aspecto bonito y todo bien cubierto. Enfriaremos ligeramente y terminaremos añadiéndole la ganache de chocolate por encima, con cuidado.
3. Finalizaremos decorando con unos trocitos de Kinder Bueno, que colocaremos sobre unos montoncitos de crema de avellana ;)
Y listísima, ya tendréis vuestra tartaza lista para ser disfrutada.
Valeee, que sí que es una tarta laboriosa, pero éstas son las que se guardan para ocasiones espaciales y así sorprender a todo el personal, jeje ;D
¡¡Mirad el interior!! No me digáis que no tiene una pintaza máxima!! =D
Como véis, las fotos del corte las tuve que hacer en otro día y en otro momento, jeje, porque no era plan de montar el chiringuito de la foto en medio del cumple, jijij =D
Pues nada, con esta foto, me despido ya por fin, jeje, (es que a complicación no sólo ha residido en su elaboración: el escribir la entrada me ha llevado casi más que en la elaboración...puf de verdad qué desesperación!).
Bueno, pues espero que pase a vuestra lista de tartas de celebración porque de verdad que está brutal ;D
Lo mejor para la semana que comienza y a endulzarla se ha dicho!! =D
....hasta la próxima recetichi!! =D =D
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