Tarta Helada de Chocolate y Avellanas

¡¡Holitas!! ¡¡Por fin estoy de nuevo por aquí y puedo estrenar el 2015 en el blog con una buena recetichi!!, jejeje, ¡¡¡Aún tenía el blog en modo navideño!! jijiji =D
Lo primero ante todo,(aunque puede que ya esté algo descontextualizado, ¬¬), desearos que este nuevo año venga cargado de muuuchos buenos momentos pata tod@s vosotr@s y por supuesto que cada uno de ellos tenga su buen acompañamiento dulce, jejej ;D
¿Y los Reyes? ¿Cómo se portaron? ¿Os trajeron muchos regalitos? Yo la verdad es que no me puedo quejar, jiji, se ve que me porté muy, muy bien y los Reyes me lo recompensaron, jijij =) =)

Peero, todo eso pasó y quedó, (por desgracia,) ya muy atrás. Tras el paréntesis y mundo paralelo que supone la Navidad para mí, llegó el día poner el modo navideño en "modo-off", de guardar la decoración, de cerrar la lista de villancicos y lo peor, de volver a la realidad... Puff, volver y hacerle frente de nuevo a mi mundo laboral que soporto cada día menos. ¡Qué difícil se me está haciendo y qué lejos veo el momento de acabar y de colgar la bata de una vez por todas, puff =( =(

Bueno, bueno, disculpad por este discursito tan lastimero, mejor cambio el chip y me pongo ya con la tartaza que me acompaña en esta ocasión =)
Fue la tarta que hice para Nochevieja, (por eso la foto tiene aún temática navideña, jeje ;D), pero es que resultó tan espectacular, tan requetebuena y es tan perfecta para cualquier ocasión en la que queráis deslumbrar a vuestros invitados con un superpostre, que no veía mejor manera de estrenar el 2015 en Dulceterapia ;)


 ¡¡Espectacular!! Es una tarta helada de chocolate y avellanas mezclada con un delicioso merengue! Os aseguro que hará las delicias de todo fanático del chocolate, jejeje ;)

La receta la encontré en mi última adquisición literaria reposteril, jiji: el superlibro de Martha Stewart, "Pasteles". Las recetas que hay son increíbles. La única pega que le estoy encontrando es que creo que a la hora de la traducción, el tema de las cantidades con respecto a las medidas de moldes que dan, no están muy acertadas. He hecho ya 2 recetas y en ambas he tenido que hacer modificaciones con respecto a ello. Lo tendré en cuenta para la próxima receta que saque de ahí. 
Aparte de este detalle, la receta fue un exitazo. Además, era bastante ligera para el postre, (a ver, está claro que no era macedonia y que era toda una señora tarta de chocolate, pero al tener textura helada entraba muy bien y no se te hacía pesada, jijij). Jumm, no sé si esto termina siendo un punto a favor o en contra jijij ;)

Ideal como tarta estrella para cualquier cumple o celebración, (más aún si el/la prota es megachocolater@)

¿Vamos con el making-of? ¡¡Todos con papel y lápiz!! =)








Para el bizcocho:
- 80g de harina.
- 3 huevos.
- 130g de azúcar.
- 50g de cacao en polvo sin azúcar tipo Valor.
- 1 cucharadita de levadura tipo Royal.
- Una pizca de sal.
- 120ml de aceite de oliva suave.
- 80ml de agua caliente.
- 1 cucharadita de pasta de vainilla.

Para el merengue:
- 4 claras de huevo.
- 200g de azúcar.
- 1/4 cucharadita de crémor tártaro, (esto es el contenido del otro sobrecito que viene junto con el bicarbonato en los paquetitos del Mercadona ;D)

Para el relleno:
- 1l de helado de chocolate.
- 150g de avellanas, tostadas y picadas.


PREPARACIÓN:

1. Comenzamos con la preparación del bizcocho: lo primero será preparar el molde elegido, (en mi caso uno de 23cm desmontable). Forrar con papel vegetal y reservar en el frigo.
Precalentar horno a 180ºC.

2. En un bol, tamizar la harina junto con la levadura, el cacao en polvo y la sal. Le añadimos a continuación 65g del azúcar total y mezclamos el conjunto. Reservamos.

3. En un cuenco aparte, mezclamos el aceite junto con el agua caliente y la pasta de vainilla. Reservamos.

4. Separamos los huevos en las yemas y las claras. Disponemos las claras en un bol junto con unas gotitas de limón y con la ayuda de una batidora eléctrica, las batimos a velocidad media/alta hasta que estén espumosas. 
En ese momento, incorporar gradualmente los otros 65g de azúcar restantes y continuaremos batiendo hasta que estén bien montadas y formen picos firmes. Reservamos.

5. Ahora, batiremos con ayuda de una batidora eléctrica las yemas que nos habían quedado hasta obtener una mezcla pálida y espesa. En ese momento, añadimos poco a poco, la mezcla de aceite y agua y mezclamos hasta integrar el conjunto.

6. Incorporar a lo anterior la mezcla de harina que teníamos reservada, poco a poco y hasta homogeneizar la crema.

7. Por último, vamos añadiendo gradualmente y con movimientos envolventes las claras montadas, con la ayuda de una espátula de goma, hasta que queden incorporadas.

8. Verter la masa sobre el molde preparado y horneamos durante unos 10-12 minutos, (quedará un bizcocho bajito, no tardará mucho en hacerse, aunque ya sabéis que cada horno es un mundo ;D).
Una vez listo, sacar del horno y dejar enfriar por completo en una rejilla, (manteniéndolo en el molde).

9. Una vez que el bizcocho esté prácticamente frío, iremos preparando el merengue: colocar en un recipiente las claras junto con el azúcar y el crémor tártaro y calentar al baño maría.
Batir de forma constante, hasta que la mezcla esté caliente y el azúcar se haya disuelto, (esto lo podréis comprobar mojando ligeramente un dedo y frotarlo luego. Si no notáis granitos de azúcar, estará en su punto ;D). 

10. Una vez listo, retirar del fuego y batir el contenido con una batidora eléctrica con velocidad creciente hasta alcanzar la alta para montar el merengue y conseguir picos firmes y brillantes, (unos 5-8minutos). Utilizaremos de inmediato.

11. Mezclaremos en un recipiente con una espátula de goma, el helado junto con las avellanas picaditas y 3/4 del merengue anterior.
Extender esto sobre la base de bizcocho reservada, (y ya fría). Alisamos superficie y terminamos cubriendo con el resto de merengue que nos queda. Formaremos remolinos con ayuda de un palillo e introduciremos el pastel en el congelador durante un mínino de 6 horas, (yo lo tuve toda la noche).


Y lista, ya sólo quedará desmoldarla un ratito antes de servir y dejarla a temperatura ambiente unos 5-10 minutos antes de hincarle el diente, jejej ;)

No me digáis que no promete, ¿ehn?
Os aseguro que no es tan difícil como el texto pueda hacer parecer. De hecho, mientras escribía la entrada estaba pensando, "me parece que se tarda más en escribirlo que en hacerla", jijij


¡Mirad qué altura! Es espectacular..., la estoy viendo y ¡¡qué recuerdos!! ¡¡Qué buena estaba!! =)


No os traigo foto del corte, (que os aseguro que era pintaza máxima), por un motivo: fui tan adelantada que la desmoldé y la preparé para la foto antes de irme a mi pueblo.
Uhmm..., 1hora de camino + tarta helada sin congelador..., ya podéis imaginar que cuando llegué allí, mi pobre tarta estaba luchando por sobrevivir, jejeje. De sabor seguía estando brutal, pero la pobre ya no estaba para fotos, jijij.


Lo que yo recomiendo es que la hagáis y así podáis contemplar en primera persona cómo era el corte y por supuesto, ¡¡cómo está de buena!! =) =)

Venga, que hay que endulzar el inicio del nuevo año, y eso, una tartaza lo hace a la perfección ;)

Listen with your heart, you will understand.
El finde está próximo, así que id pensando ya en el dulce que lo acompañará, ¿ehn? ;)

....hasta la próxima recetichi!! =) =)

Comentarios

Entradas populares